Este es un mensaje que nos habla sobre entender que tenemos un Dios poderoso, un Dios de fuego. Este mensaje nos llama a mantener ese fuego encendido en todo momento.
Este es un mensaje que nos hace preguntar si sabemos dónde estamos parados, si tenemos claro para lo que nos llamó el Señor independiente de cuál sea nuestro oficio natural en la tierra.
Este es un mensaje que nos dice que el Señor es quien nos guarda y quien nos perfecciona, por lo tanto debemos ser una iglesia activa para su obra porque él se encargara de tener bajo control nuestra vida.
Este es un mensaje que nos recuerda ser agradecidos con el Señor en todo momento, para que el perfume de adoración que elevemos a él, sea siempre puro y santo.